El líquido refrigerante o anticongelante es esencial para el funcionamiento adecuado de un automóvil. Se aconseja realizar inspecciones periódicas para garantizar que sus propiedades y niveles se encuentren dentro de los valores óptimos, dado que está directamente vinculado a la temperatura del motor. En Ardasa, te proporcionamos información detallada sobre este líquido indispensable para tu vehículo.
Qué es el líquido refrigerante del coche
Este compuesto es un químico esencial que controla la temperatura del motor y previene el sobrecalentamiento. Este fluido, indispensable para el funcionamiento adecuado del automóvil, opera en un amplio rango de temperaturas, desde 30 hasta 140 grados centígrados, manteniendo el equilibrio térmico dentro del sistema del motor.
Su tarea principal consiste en disipar el calor generado por el motor para evitar sobrecalentamientos, razón por la cual se le llama refrigerante. Además, se le conoce como anticongelante debido a su capacidad para resistir temperaturas extremadamente bajas durante el invierno, evitando así que algunas partes del vehículo se congelen. Tanto el sobrecalentamiento como la congelación pueden causar daños mecánicos graves. Además de estas funciones, el líquido refrigerante actúa como lubricante al limpiar y proteger las piezas del motor contra la oxidación, gracias a sus propiedades anticorrosivas.
Qué líquido refrigerante debes usar
Los dueños de automóviles frecuentemente se preguntan qué tipo de líquido deben utilizar en sus vehículos. Existen dos tipos principales: los orgánicos y los inorgánicos. Los líquidos orgánicos son más duraderos, ya que no contienen silicatos y tienen una temperatura de congelación más alta. Cada automóvil tiene un manual del fabricante que especifica el tipo de líquido anticongelante más adecuado para su motor.
El clima y las condiciones de estacionamiento, como si el vehículo está guardado en un garaje o se encuentra en la calle, así como las temperaturas extremadamente altas o bajas, son factores cruciales para determinar el tipo y la calidad del líquido que se debe utilizar en el automóvil. Estos aspectos influyen significativamente en la elección del líquido anticongelante adecuado. Sobre todo, si tu coche es de segunda mano y el motor es más delicado.
Cómo comprobar el líquido refrigerante
Verificar el nivel de líquido es una tarea fácil. En primer lugar, localiza el recipiente de llenado del sistema, generalmente hecho de plástico transparente y equipado con un tapón azul o negro. El manual de mantenimiento del vehículo te orientará en su ubicación.
Al rellenarlo, observa los marcadores que indican el nivel mínimo y máximo para asegurarte de que esté dentro de esos límites. De esta manera, podrás determinar si necesita ser rellenado o no. Finalmente, después de rellenar el refrigerante, detén el coche después de conducir un rato y verifica si los niveles han cambiado. Cualquier variación podría indicar una fuga o un problema en el motor.
Aspectos clave con el refrigerante
Para asegurar un rendimiento óptimo del vehículo, es esencial entender los aspectos clave del líquido y utilizarlo adecuadamente.
Ajuste preciso de la concentración
Es crucial mantener una proporción específica de agua y aditivo en el compuesto. Un exceso de aditivo puede afectar negativamente la capacidad de absorber calor, mientras que una concentración muy alta eleva el punto de congelación, lo que podría dañar el motor a largo plazo.
Elección del anticongelante adecuado
No todos son iguales. Usar el tipo exacto recomendado por el fabricante del vehículo es fundamental para evitar problemas graves en el sistema de refrigeración y la junta de la culata. Los anticongelantes vienen en varios colores, como verde, rojo y azul, lo que facilita su identificación. Este es uno de los motivos principales por el que los motores de los coches no duran lo indicado. Cuidar tu coche hará que dure más.
Manipulación segura del líquido
Manipularlo requiere precaución. Siempre use guantes, ya que el líquido refrigerante es tóxico y puede ser perjudicial para la piel. Además, evite el contacto con los niños y nunca ingiera el líquido. La mayoría contienen Glicol, que tiene un sabor dulce, pero es extremadamente peligroso para los niños. Si tienes cualquier duda, consulta con nuestros profesionales del taller de Ardasa en Madrid y estarán encantados de ayudarte.
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